Ambas técnicas consisten en la aplicación a nivel superficial, bien de frío o bien de calor,  directamente sobre el tejido en cuestión.

Crioterapia

Se trata pues de la aplicación de frío directamente sobre un tejido y se puede realizar bien por contacto, por convección o por evaporación.

INDICACIONES

• Cualquier traumatismo mecánico y durante la fase aguda, es decir, desde las primeras horas post-lesión.
• Postcirugía.
• Artritis aguda o durante las fases de reagudización del proceso artrítico.
• Patologías musculoesqueléticas en fase aguda que cursan con inflamación (tenosinovitis, tendinitis, miositis, etc.).
• Abrasiones o quemaduras.
• Como método combinado de frío-calor para reducción de edemas, etc.

Termoterapia superficial

La termoterapia se puede aplicar mediante diferentes métodos físicos al igual que en el caso de la crioterapia (irradiación, conducción, convección o conversión) y  tanto a nivel superficial como a nivel profundo. Sin embargo, cada tipo de efecto deseado se produce mediante técnicas o terapias diferentes.  Es decir, a nivel profundo se realiza por ejemplo mediante ultrasonidos y a nivel superficial mediante infrarrojos, sauna o bolsas de gel entre otros.

INDICACIONES

• Contracturas y espasmos musculares.
• Analgesia de puntos gatillos.
• Molestias del aparato gastrointestinal y del urinario.
• Adherencias.
• Apoyo de kinesiología y masaje.
• Patologías osteomioarticulares crónicas, etc.